Según un informe del USDA sobre los stocks de granos y piensos de Brasil, la cosecha de maíz se prevé un 12% menor que la del pasado año, esta disminución de la producción, junto con el aumento de las exportaciones incentivadas por la devaluación del real brasileño frente al dólar, han conllevado a un fuerte aumento de los precios desde el mes de marzo y a una escasez interna de esta materia prima.
Este aumento de los precios del maíz, materia prima para la fabricación de piensos, está afectando negativamente a los productores de porcino y aves. El elevado precio interno del maíz y la situación de incertidumbre económica hacen prever una desaceleración del 2% en el crecimiento de estos dos sectores ganaderos. Actualmente, algunas plantas de procesamiento de carne de cerdo y aves de corral han respondido mediante la reducción de los turnos de trabajo, la aplicación de vacaciones obligatorias para los empleados e incluso el sacrificio de animales para los que los productores son incapaces de continuar alimentando.
Ante esta situación, algunos estados han propuesto medidas para restringir las exportaciones de granos en sus estados. Por ejemplo, Goiás, que produce alrededor del 10% del total de maíz de Brasil, volvió a incluir una ley que limita las exportaciones de maíz y soja a sólo el 70 por ciento de la producción total. Por su parte, el gobierno está considerando un nuevo impuesto a la exportación del maíz y la soja como medida para fomentar y dar prioridad a las ventas nacionales.
Fuente: 3tres3
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